En un panorama cada vez más competitivo, más negocios caen en cuenta de que ser renovable es más que ser amable con el ambiente: tiene un propósito económico con el tiempo.
Te traemos varias de los motivos más importantes por las cuales las compañías tienen que preocuparse más por la sustentabilidad.
-Liderazgo. Habitualmente, las entidades aprobaban planes de responsabilidad social para cumplimentar con las reglas gubernamentales y evitar multas. Actualmente, las empresas de altos estándares están adoptando el concepto de responsabilidad social para ser parte de la discusión sobre administración ambiental.
-Incentivos financieros. Los gobiernos a nivel federal, de los estados y de la zona ofrecen una gama de alicientes financieros para efectuar acciones sustentables correctas. Estos incluyen el financiamiento tributario por ingresos basado en el financiamiento, la producción o la adquisición, la depreciación acelerada para algunos costos de dinero, las prerrogativas de los impuestos a las compra/venta de los estados o locales y los subsidios en billetes.
-Ahorro de costos. Reyna Overseas trabaja en un programa que coloca a los alumnos en empresas, como McDonal’s Corporation, Verizon y Target Corporation, para hacer un caso de empresas para la eficiencia energética, mediante la selección de modos de disminuir radicalmente la utilización de energia electrica y gas.
Desde 2008, los becarios han descubierto oportunidades de eficiencia energética, empezando por la sustitución de bombillas a la sustitución de PC’s viejas, que ahorrarían 1.000.000.000 en costos de operación totales durante la duración del plan.
-Exigencia del consumidor. Hacerse sustentable no solo ahorra presupuesto, además genera diferentes ingresos al interesar a compradores que se preocupan por la contaminación que genera una empresa, mostrando una enorme área de posibilidad para los proveedores de ecotecnologías.
-Aminorar contingencias. Con la ampliación de los precios de la energía y la inseguridad en la provisión de estos, es importante que las empresas comiencen a reconsiderar de qué forma obtienen y usan los elementos.